Las frutas y hortalizas que se desechan, simplemente porque no tienen un aspecto perfecto, representan una parte importante del problema mundial del desperdicio de alimentos. La mayoría de las veces, los productos mal formados se separan ya durante la cosecha y ni siquiera llegan al mercado, sólo por no cumplir con nuestras expectativas estéticas. Demasiado doblados, demasiado rectos, demasiado rugosos, demasiado lisos... hay muchas razones por las que muchas manzanas, zanahorias y otros productos perfectamente comestibles acaban en la basura. Sin embargo, estos productos menos atractivos tienen un sabor igual de delicioso y, una vez procesados e incoporándolos a tu deliciosa comida, ni siquiera importa su aspecto de antes.
Durante el mes de mayo, si compras una Minipimer de Braun, donaremos 1 kilo de comida a la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL) y sus 54 bancos asociados. Así aportamos nuestro granito de arena a que ninguna persona quede atrás y que aquellas que son más vulnerables no les falten alimentos, porque el hambre no puede esperar.
¿A quién le importan las rugosidades y las formas irregulares? Lo que cuenta es el sabor, ¿no?
Te encantaría abrir un saco de patatas y encontrar uno con forma de corazón, ¿verdad? Y sin embargo, muchos alimentos ni siquiera llegan al supermercado por razones tan cosméticas. Los que sí llegan, como el pepino torcido o la manzana abollada, suelen quedarse en la estantería. Sin embargo, esto no afecta al sabor, y si el aspecto diferente no te importa, puedes comprar frutas y verduras imperfectas en el mercado, en las tiendas ecológicas o incluso directamente al productor. Además, en muchos pueblos y ciudades se abren cada vez más tiendas que venden alimentos "sin envasar" o productos "imperfectos", directamente de los agricultores, a menudo a precios mucho más bajos. Así no sólo ahorras dinero, sino que reduces los residuos de envases. Por lo contrario, si prefieres la comodidad, también puedes recibir cajas de fruta y verdura directamente en tu casa.
Marca la diferencia y demuestra cómo de fácil es cuidar de ti y del medioambiente. Desde Braun y Too Good To Go te animamos a redescubrir y aprovechar esas verduras y frutas que se consideran “imperfectas” o “feas” por no cumplir con los estándares de belleza ideales. ¡Recuerda que todas las frutas y verduras son igual de deliciosas sin importar que sean imperfectas! Salvando comida estarás generando un gran impacto positivo para el planeta.
#LaComidaNoSeTira
Transforma tu consumo para que sea más sostenible y así evitarás el desperdicio de alimentos en casa. Usa tu creatividad en la cocina y conviértete en Waste Warrior. Con la app de Too Good To Go encontrarás muchos establecimientos cerca de ti con los que podrás salvar su excedente de comida a un bajo precio. Algunos de los más conocidos son: Carrefour, Alcampo, Dia…
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Un tercio de todos los alimentos producidos en el mundo acaba en la basura. O dicho de una manera más gráfica: en una superficie del tamaño de China se cultivan alimentos que nunca se comen. Las causas son múltiples y van desde los momentos incorrectos de la cosecha, las condiciones climáticas y el mal almacenamiento hasta el transporte inadecuado. En el caso de la manzana, la zanahoria y demás, se añaden como criterios de exclusión la forma, el color y el tamaño desigual. Después de las raíces, los tubérculos y los frutos oleaginosos, la categoría de frutas y hortalizas representa la mayoría de los alimentos que no acaban a la venta después de la cosecha.
(origen de la imagen: Statista)
En definitiva, lo que cuenta son los valores nutricionales, como las vitaminas y los minerales, y, por supuesto, el sabor. A continuación puedes ver lo perfecto y delicioso que puede ser un plato, aunque esté preparado con frutas y verduras deformadas.
Picar y pelar verduras torcidas y frutas dañadas puede ser una tarea un poco pesada. Con nuestros ayudantes de cocina, podrás transformar tus ingredientes golpeados y magullados en platos exquisitos en un abrir y cerrar de ojos.